Nickología

Debo comenzar por decir que hoy haré abuso de los paréntesis, creo que son grandes aliados cuando de histrionismo se trata y a falta de caras y gestos, sirven como aclaración.

Hace tiempo que vengo observando el fenómeno del Nickname. Me he dado cuenta con el correr de los años como cibernauta (ojo!) que un sobrenombre puede decir mucho sobre su nombrado (valga la redundancia).

Mucha gente jura (me ha sucedido, allá atrás en el tiempo) que el nick le abrirá las puertas a un mundo de seducción, glamour, oportunidades sexuales y vida social. Piensan que si el dicho invita a reflexionar, se da aviso de los pasos a seguir, se dejan celulares o tiros por elevación, la vida dará un giro, sus ex se presentarán al boliche, llamarán luego de décadas de no aparecer o pensarán: "Esta mina es una copada, no entiendo porqué la dejé por Laurita".

Yo sé que vos, lector, pensás que mis aceveraciones son extremistas, y aunque no reniego de mi falta de grises, te pido que vayas más allá, al verdadero sentir del pobre tipo que vuelca en su apodo todo aquello que le falta durante la charla.

Aquí una seguidilla de observaciones y descargas vehementes (son de mis preferidas).

Relaciones directamente proporcionales:

• A mayor cantidad de dibujitos, iconos, signos tipográficos y firuletes en un nick, más las chances de que el nombrado sea un goma y/o un cachirulo en sí mismo.
• A mayor cantidad de información sobre paradero del dueño, más altas las chances de que sea un soltero necesitado de afecto.
• A mayor recambio de nick, más las posibilidades de que la persona no se sienta a gusto consigo mismo.

Relaciones inversamente proporcionales:

• A mayor cantidad de mayúsculas y minúsculas en una misma palabra, menos interesante lo que la persona tiene para decir (por eso el intento de decoración)
• A mayor cantindad de explicaciones sobre la vida privada, menos chances de que exista una.

Aprovecho para comentarles a los usuarios del MSN plus (que son el 0, 5% de la población y colocan cachicruladas con la intención de que el nick tenga un color diferente del predeterminado) que el otro 99,5% lo único que vemos es un apodo lleno de códigos que a la larga no colaboran al fin último del MSN, la comunicación.

Seguramente cuando cierre esta entrada surjan nuevas ideas que iré desarrollando con el correr de la vida. Todos los derechos sobre Nickología son patrimonio de la humanidad (Copyleft) y han ayudado en esta oportunidad a que libere mis frustración de naturaleza freelance.

Me despido sin más, aunque no por eso con menos.